YouTube presentó un programa piloto destinado a ciertos usuarios cuya cuenta fue cancelada. Con ello, se podrá abrir un nuevo canal, pero con condiciones estrictas y con la exigencia de reconstruir comunidad y monetización desde el inicio.
Los participantes deberán iniciar sesión desde una computadora en el canal desactivado. Si el sistema determina que cumplen con los requisitos, aparecerá una opción para solicitar un canal nuevo.
Sin embargo, esta opción no restaura el historial del usuario ni sus beneficios anteriores.
YouTube aclaró cómo los solicitantes podrán subir videos anteriores únicamente si cumplen con las Normas de la Comunidad. Además, el nuevo canal deberá alcanzar los criterios del Programa de Socios de YouTube antes de acceder nuevamente a monetización.
Esta decisión marca un cambio en la política de cancelación definitiva, vigente desde 2020, que excluía cualquier forma de regreso tras una infracción grave.
Según YouTube, las solicitudes serán revisadas considerando la severidad de las faltas, su recurrencia y el posible impacto generado dentro o fuera del entorno digital.
Igualmente, los usuarios eliminados por infringir derechos de autor o las políticas de Responsabilidad del Creador no podrán acceder a este programa. Tampoco será posible solicitar el regreso si el canal o cuenta de Google fueron eliminados por decisión voluntaria.
YouTube se ‘suaviza’
Para acceder a esta segunda oportunidad deberán haber transcurrido al menos doce meses desde la fecha de cancelación. Durante ese tiempo, permanece vigente la opción de apelar. Si el recurso no prospera, se habilita la opción de iniciar el proceso de solicitud para un canal nuevo.
El canal creado bajo este mecanismo no incluirá suscriptores, historial de vistas ni acceso inmediato a funciones de monetización.
La plataforma indicó que la reconstrucción de audiencia dependerá enteramente del esfuerzo individual y de los contenidos producidos a futuro.
“Sabemos que muchos creadores que fueron despedidos merecen una segunda oportunidad”, señaló el equipo de YouTube en su comunicado.
Entre los puntos detallados, se explicó que este nuevo canal no reemplaza al anterior, ni representa una revocación de la sanción original.
Su aprobación dependerá de una evaluación caso por caso y de la adherencia a los criterios vigentes en materia de seguridad, responsabilidad y cumplimiento.
Finalmente, desde su implementación, YouTube enfrentó críticas sobre la rigidez de sus sanciones.
Este programa introduce un ajuste de política enfocado en creadores que busquen regresar bajo condiciones nuevas, sin restauración automática de privilegios ni reconocimiento previo.