En el informe sobre calidad de Capgemini, se hizo énfasis en que la mayoría de las empresas (90 %) buscan adoptar inteligencia artificial generativa (Gen AI). Dentro de sus prácticas de ingeniería de calidad (QE), pero sólo el 15 % tiene una implementación a escala empresarial.
Oficialmente, es la 17ª edición del Informe Mundial sobre Calidad 2025: Adaptándose a los Mundos Emergentes, que se realizó en conjunto con OpenText. En relación con las barreras de adopción, se encuentran la privacidad (67 %), complejidad (64 %) y competencias (50 %).
“Para que las empresas liberen todo el potencial de la inteligencia artificial generativa en la ingeniería de calidad. Es necesario invertir en habilidades, gobernanza, datos y alineación de los resultados, ya que la IA amplifica capacidades no las sustituye”, aclaró Tal Levi-Joseph, VP senior de Gestión de Entrega de Aplicaciones en OpenText.
Un dato clave del informe sobre calidad de Capgemini, es la persistencia de la brecha a nivel de habilidades. Ya que el 50 % informó que sus organizaciones carecen de la experiencia que se requiere en tendencias estratégicas como inteligencia artificial o automatización.
Así la investigación constata una brecha cada vez mayor entre el interés de las empresas por la adopción de IA generativa, para integrarse a las iniciativas de QE. Sin embargo, se requiere de una alineación entre la innovación operativa y la supervisión estratégica, para crear valor.
“Si se hace una comparación entre los últimos informes, se revela que la IA generativa en la ingeniería de calidad está madurando a nivel estratégico. A pesar de que el progreso técnico es claro, muchas empresas aún tienen ciertas dificultades”, agregó Mark Buenen, líder Global de Ingeniería y Pruebas de Calidad en Capgemini.
Mejores prácticas dentro del informe sobre calidad de Capgemini
Otro punto clave del informe sobre calidad de Capgemini, es que las empresas reportaron un aumento promedio de su productividad (19 %). Pero solamente, la tercera parte percibió un nivel de ganancias mínimo, por esto se necesitan estratégias de integración más eficientes.
A esto se agrega una desalineación estratégica, ya que muchas organizaciones tratan a la IA generativa como una mejora táctica, en lugar de un habilitador estratégico. Algo que resulta en una ejecución fragmentada e iniciativas de implementación con financiación insuficiente.
“Tal como lo revela la investigación, las organizaciones que tienen éxito son aquellas que se fortalecen, en términos de sus fundamentos de ingeniería de calidad. Y además utilizan la IA para aumentar tanto sus capacidades centrales, como el diseño, desarrollo y pruebas a nivel de dichas cargas de trabajo”, mencionó Levi-Joseph.
En resumen, el informe sobre calidad de Capgemini reveló el surgimiento de una inteligencia colaborativa, donde la experiencia humana y las capacidades de IA se integran. Para generar resultados de alta calidad, de hecho este enfoque híbrido será de alta relevancia en el 2026.
Finalmente, en el documento se mostró que, si bien el enfoque “shift-left” sigue teniendo un alto nivel de relevancia en QE. La perspectiva del “shift-right” va ganando terreno, por ello el sector empresarial debe replantear sus estrategias de adopción tecnológica y transformación digital.
“Es fundamental alinear la ingeniería de calidad habilitada por la IA generativa con todos los objetivos de negocio. Durante 2025 vimos un mayor enfoque tanto en gobernanza como en el retorno de inversión y el impacto interfuncional. Ahora el desafío es cerrar la brecha de la IA para que sea rentable”, finalizó Buenen.










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